¿SABÍAS QUE?
Un día como hoy, 1 de marzo se celebra el Día de la Cero Discriminación, este día fue proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas, basándose en el Artículo 1° de la Declaración Universal de Derechos Humanos, el cual constituye un llamamiento para promover y celebrar el derecho de cada persona a vivir una vida plena con dignidad, independientemente de su aspecto, sexo, edad, religión, lugar de procedencia, condición social, opiniones, raza, discapacidad, origen étnico, orientación sexual, lengua, condición médica o cualquier otro motivo.
La Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación, menciona que la discriminación es toda distinción, exclusión, restricción o preferencia que, por acción u omisión, con intención o sin ella, no sea objetiva, racional ni proporcional y tenga por objeto o resultado obstaculizar, restringir, impedir, menoscabar o anular el reconocimiento, goce o ejercicio de los derechos humanos y libertades.
En este sentido, el derecho a la no discriminación se enfoca en que todas las personas reciban un trato digno: respeto a su persona, autonomía confidencialidad y privacidad, así mismo, garantizarles la ausencia de abuso en igualdad de condiciones.
Respecto al tema, en México el INEGI y CONAPRED, en coordinación con la CNDH, la UNAM, y el CONACYT, crearon el proyecto “Encuesta Nacional sobre Discriminación” (ENADIS 2017), en el cual se indica que el 20.2% de la población de 18 años y más declaró haber sido discriminada por algún motivo en los últimos 12 meses; los motivos de discriminación que se señalan principalmente son: la forma de vestir o arreglo personal, el peso o estatura, la edad y las creencias religiosas según.
Dentro de esta Encuesta Nacional se destaca que 86.4% de las personas con discapacidad se enfrentó con alguna barrera de accesibilidad cuando buscó información sobre algún trámite, servicio o programa gubernamental en el último año y 21.8% de las personas con diversidad religiosa se siente poco o nada libre para expresar sus creencias, cultos o ritos en su comunidad.
Este día, constituye un día de llamamiento no sólo para promover y celebrar el derecho de cada persona a vivir una vida plena con dignidad, independientemente de su aspecto y su lugar de procedencia, de igual manera celebrar la diversidad y rechazar la discriminación.